La Negra Federal

Cosquín Rock 2023 ¡El pogo más grande de Latinoamérica!

Más de 200 mil personas disfrutaron de más de un centenar de artistas y de una amplia gama de propuestas. Una edición histórica del festival que sigue marcando el rumbo de la escena musical actual.

Si bien el eje principal sigue siendo las propuestas artísticas que suceden sobre los escenarios (este año fueron seis: Norte, Sur, Montaña, Paraguay, Boomerang y La Casita del Blues), desde hace algunos años el Cosquín Rock se ha convertido en el festival de cultura popular relacionada al rock de nuestro país por excelencia. Analizar este fenómeno que lleva 23 años in crescendo implica profundizar en los contenidos, la variedad de propuestas (musicales, culturales, gastronómicas, educativas, ambientales y más), la renovación generacional, la evolución en los hábitos de consumo, entre otros aspectos que llevarían a convertir esta nota periodística en un artículo sociológico.
Con respecto a las jornadas vividas el sábado 18 (Día 1) y domingo 19 (Día 2) de febrero, fueron varias las características sobresalientes que lo convirtieron en una edición histórica. A semanas de su concreción, las entradas estaban agotadas. Más de 200 mil personas marcaron un récord absoluto en este envío número 22 (al público se suman las 150 mil views que tuvo ese fin de semana desde la plataforma Flow). Hoy se estudia el triple impacto (económico, social y ambiental) que arrojó esta edición del festival, produciendo asombrosos números en diferentes variables económicas, sociales, turísticas y culturales.

Sábado 18 de febrero – Día 1

Sin dudas la música fue, es y será protagonista de este festival, y esta jornada no fue la excepción. Pero sí hubo otro protagonismo, y fue el clima fresco y frío que reinó especialmente en el horario nocturno. Pero sabemos que la lluvia, el calor o el frío, no empañan en absoluto la experiencia que se vive en el evento de origen cordobés. En el Escenario Norte prevalecieron las propuestas más rockeras, en su mayoría populares y con un extenso recorrido artístico. Así pasaron por la tarde Farolitos (de Rosario), El Bordo (que puntualmente a las 15 tenía un predio con mucha gente esperándolos), La Chancha Muda, Ojos Locos y Guasones. La noche llegaría con los populares uruguayos de No Te Va Gustar, el inefable show de Skay y Los Fakires y la aplanadora del rock, Divididos (luego del festival se difundieron videos de Ricardo Mollo y Skay estableciendo un cruce para la posteridad, a plena charla sobre guitarras, cuando realizaron las pruebas de sonido). El cierre estuvo en manos, voz y guitarra de Juanse que se paseó por su repertorio solista y de Ratones Paranoicos; y tuvo a un seleccionado de músicos como invitados sorpresa: León Gieco, Celeste Carballo, Ale Kurz de El Bordo, Mateo Sujatovich de Conociendo Rusia y Mauricio “Junior” Lescano (ex La 25) de Caras Extrañas.

En la otra punta del Aeródromo de Santa María de Punilla se entronca el Escenario Sur que brilló por el recambio generacional y la diversidad de propuestas artísticas. Synopsis (de Córdoba), Lara91k, DLD (de México), Zeballos (de Uruguay), Alemán (de México) coparon la tarde con muchísimo público joven que celebra la gran oferta de artistas urbanos que no paran de crecer. El segundo tramo del Sur fue tomando más color (y calor) con los shows de Conociendo Rusia, el rapero español Rels B, la consagración de Trueno y los ya clásicos de Turf. El cierre estuvo a cargo de Juan Ingaramo como digno representante de la escena pop y alternativa.

Otra de las novedades en esta edición fue la incorporación del Escenario Montaña, ubicado en la mitad del predio y con una escenografía natural de fondo única, reemplazando a las carpas que solían estar en el medio del recorrido. El line up que tuvo fue digno de un festival aparte. Estelares rompió el silencio con sus grandes canciones que todos conocen. Seguido, los mendocinos de Usted Señálemelo, que volvieron al ruedo, fueron uno de los números más esperados de la tarde. La fiesta que logró La Delio Valdez le puso el tinte tropical a la velada rockera. La multifacética artista estadounidense Laura Pergolizzi, más conocida como LP, fue una de las perlas internacionales de la jornada, convirtiéndose en una de las performances preferidas por el público. Y si de regresos hablamos, Catupecu Machu hizo vibrar la montaña con su nueva reencarnación a dos baterías. Nuevos y nostalgiosos estuvieron del principio al fin acompañando al combo de Fernando Ruiz Díaz. Cerca de la medianoche, el Escenario Montaña fue el marco ideal para la fiesta electrónica que armaron los sets de Vesica Piscis, Nicolás Taboada, Enrico Sangiuliano y Charlotte de Witte.

Las nuevas propuestas indies, urbanas y alternativas tuvieron su propio lugar, y ese fue el Escenario Boomerang, que en su día inaugural contó con la música de Jon Deca, Letizia Vocos, Bad, Ilan Amores, Joven Breakfast, Fermín (también integrante de la banda de Dillom), Odd Mami y Gauchito Club. Luego vinieron los shows de dos de los integrantes del colectivo Rip Gang: Muerejoven y Saramalacara. Para el final, dos muy esperados, el madrileño Rusowsky y Gativideo.

Curado por los programadores del club domiciliado en Córdoba capital que lleva el mismo nombre, el Escenario Paraguay sigue siendo un faro del indie pop y la música urbana. La tarde en el escenario rodeado de bosque tuvo a Los Hermanos Morgan, Clara Cava, Rayos Laser y Las Ligas Menores como protagonistas. Pero sin duda la tríada de propuestas que le siguieron convencieron a miles a encallar frente a esas tablas para disfrutar de los destacados shows de la mexicana Lila Downs y su llamativa mixtura musical, el referente indie El mató a un policía motorizado y los mendocinos Mi Amigo Invencible, que editaron el recomendable “Isla de oro” en 2022. El dúo pop Koino Yokán sirvió de antesala para el gran cierre de la mano de la divertida Fiesta Bresh.

Los amantes del blues y sus derivados, como un gran número de curiosos, pasaron por La Casita del Blues, particular escenario/escenografía que reivindica este querido género musical histórico. Greta Kohan y Viejo Motor tuvieron la responsabilidad de darle comienzo. Luego, la primera sorpresa del espacio. En la actuación de Wayra Iglesias, la intervención de Gabriel “Tete” Iglesias y Jorge “Tanque” Iglesias, padre y tío respectivamente de la solista, además de bajista y baterista de La Renga. Luego vinieron Los Búfalos Sedientos, The Ginger Hearts, Déborah Dixon (sin dudas, una de las mejores y más potentes voces de nuestro país), Don Vilanova & Soul Bros (una cátedra del maestro Botafogo), y el final con la cantante estadounidense (radicada en Argentina) Joanna Maddox.

Domingo 19 de febrero – Día 2

El calor típico del período veraniego obligó a dejar los abrigos para reemplazarlos por protector solar. Una segunda jornada que desde el principio olía a convertirse en el corolario de una edición histórica.

El Escenario Norte siguió rockero y popular como en su jornada inaugural. Apenas comenzó la tarde, El Vuelto, comandado por Ismael Sokol (el hijo del Bocha) mostró sus canciones para darle lugar al show de Jóvenes Pordioseros. No importa el horario, Toti Iglesias sabe bien cómo despertar las primeras pasiones y arengas a fuerza de su carisma y rocanrol. Y La Plata estuvo presente con los cada vez más ascendentes y coreados Cruzando el Charco. El rock latino y psicodélico de El Plan de la Mariposa sigue haciendo escalar en la grilla a la agrupación oriunda de Necochea. La nueva propuesta rocanrolera de Junior (ex La 25) es Caras Extrañas, que complace a todos incluyendo en su set las recordadas canciones de la banda de rock Stone nacida en los 90´s. Los seguidores de Las Pastillas del Abuelo fusionaron ese momento tan agradable donde la tarde se convierte en noche y las particulares letras de las canciones de LPDA son adueñadas por miles. Y cuando uno no esperaba sorpresa alguna sobre el Norte, llegó Ciro y Los Persas para dar el show más arriesgado de la edición. Esta vez, el ex Los Piojos, versionó sus canciones acompañado de la Orquesta Sinfónica de Villa María. Cuarenta músicos en escena brindado un show único en el festival de rock más popular del país (recordar que Ciro publicó “Sueños”, disco acompañado por la Orquesta Filarmónica de Mendoza), con un set list repasando el repertorio persa y piojoso. Concluido el festival, Ciro manifestó por sus redes cierto malestar contra la prensa que no reconoció, ni hizo alusión a semejante apuesta. Los uruguayos de La Vela Puerca pasearon entre sus clásicos y las canciones de su última producción “Discopático” (2022). Y si alguien puede cerrar el Cosquín Rock, esa banda es Las Pelotas, la única con asistencia perfecta en todas las ediciones, que volvió al escenario principal y tuvo a Ismael Sokol de invitado en “Día Feliz”.

El Escenario Sur fue testigo de momentos únicos, irrepetibles e inéditos. Inició con la cordobesa Paz Carrara y los festivaleros de Silvestre y La Naranja. Los españoles Vetusta Morla demostraron sus años de ruta y se llevaron el cariño de los argentinos que ya conocían sus canciones y de muchos otros que de seguro se sumarán luego de su destacada presencia. Pero si hay alguien que se llevó las miradas y los oídos de una significativa porción del público (por lo menos el 50% del público y del predio) fue el rosarino querido por muchas generaciones. Fito Páez se puso en el bolsillo a una verdadera masa que festejó cada hit de su carrera (“11 y 6″, “Polaroid de locura ordinaria”, “Al lado del camino”, “Circo Beat”, etc.) y que formó parte de este show (El amor 30 años después del amor) donde rememora el disco más vendido del rock nacional (“El amor después del amor”, 1992). Después vendría la efectiva y contundente puesta de Airbag, la consagración a las ligas mayores de Dillom (que se quejó posterior al festival porque la plataforma Flow lo rebautizó Dillon, con n) y el cierre con ese dúo dinamita que es Ca7riel y Paco Amoroso.

Con las montañas a sus espaldas, la uruguaya Agustina Giovio y Manu Martínez se encargaron de animar el comienzo en el Escenario Montaña. Luego, el dúo platense (esta vez como quinteto) Peces Raros captaron la atención de muchísima gente que conocía su rock electrónico y otros tantos que los descubrieron interpretando las canciones de su recomendado disco “Dogma” (2021). Y si de consagraciones hablamos, Bándalos Chinos deja de ser el máximo abanderado del indie pop para convertirse en merecidas estrellas de rock internacional a fuerza de profesionalismo y un destacado cancionero. La propuesta internacional en este territorio llegaría a plena noche con los colombianos Monsieur Periné y su particular mix de pop, folk & jazz. Aperitivo ideal para uno de los shows más esperados de la jornada. Babasónicos presentó su último disco “Trinchera” (2022) y repasó las grandes canciones de su carrera (“Los Calientes”, “Putita”, “Deléctrico”, etc.), con una puesta visual a cargo de Sergio Lacroix. El DJ y productor neerlandés Tijs Michiel Verwest, más conocido mundialmente como Tiësto, fue el broche de oro para hacer bailar a los que se quedaron hasta el final.

Al parecer, el día 2 en el Escenario Boomerang tuvo unos miles de abonados que programaron su estadía para disfrutar de un line up más que atrayente. Odios compartidos, Cata Raybaud, Anyi, Mía Zeta y Zenón Pereyra, fueron los primeros anfitriones de la tarde. Luego, varios platos fuertes confirmaron su crecimiento (El Zar, 1915 y Feli Colina) y su reconocimiento en el mercado musical. Los shows de Emmanuel Horvilleur y de Lisandro Aristimuño (el show comenzó más tarde de lo pautado) fueron dos de los puntos más altos de la jornada de cierre, pese a la superposición con otros artistas con los que comparten un público similar. Muerdo, el proyecto solista del cantante español Paskual Cantero antecedió a la fiesta Polenta, que le puso el toque bailable y la bajada de telón del escenario.

Si bien no tuvo la afluencia de público esperada, el Escenario Paraguay tuvo el domingo una grilla artística más que interesante de principio a fin. Comenzó con el funk rapeado de los rosarinos Caliope Family, y continuó con el rapero, productor & beatmaker Santoz (Francisco Porta, residente en Córdoba), el electro punk & trap de The Colorated (de Córdoba), el rap del marplatense Ronpe 99 (Tomás Miguel Díaz), el hip hop español del dúo Cráneo & Lasser y el dúo de electro rap Intendente (que tuvo a Ca7riel entre el público). Llegada la noche fue el turno de Sofía Gabbana (la hermana rapera de Nathy Peluso), el políticamente incorrecto trap & drill de El Doctor y la contracultura urbana de Taichu y la cordobesa Ms. Nina. El cierre a pura baile con la fiesta Katana (feat. Santa Salut).

El blues, el soul y el jazz tuvieron su cobija nuevamente en La Casita del Blues. Escorpia, Gloria Aguilar y Cruxados, 29 Caminos Blues, The Rhythm Gamblers y Los Masones animaron la tarde en una de las apuestas que defiende por sus gustos musicales, José Palazzo, artífice del Cosquín Rock. Por la noche, fueron de la partida Cora y Nanda Moura & Toyo. El cierre fue con la cantante estadounidense, oriunda de Detroit, JJ Thames.

Con más de dos décadas de vida, año tras año el Cosquín Rock no deja de sorprender. Mientras la marca sigue exportándose a otros destinos de América y el viejo continente, nos quedamos pensando con que nos sorprenderá el próximo año.

Javier Arbuatti
Martín Pozzo
Fotos: Prensa Cosquín Rock

Show More

Noticias relacionadas

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *